Periodista y oleicultor. Tras comenzar su carrera en Radio Nacional y Televisión Española con 18 años, Pepe G. Barroso pasó por Televisión de Galicia donde presentó el programa de Deportes del fin de semana. Los últimos 14 años trabajó en Cuatro y CNN+. Pepe G. Barroso ha cambiado la redacción de la televisión por las tierras del Parque do Xurés en Ourense. “En el medio de tan larga trayectoria periodística decidimos recuperar la oleicultura en Galicia con Eidos de Iria, una marca oleica a la que hoy dedico las 24 horas del día desde hace una década”, explica Pepe.
Pepe G. Barroso intuía una situación complicada en el sector de los medios de comunicación y decidió reinventarse: “arriesgamos quedándonos con valentía con Eidos de Iria, una marca que hoy por hoy nos ha dado lo que pretendíamos en la economía familiar”. Fundó hace una década Eidos de Iria tras heredar las tierras de sus abuelos en el Parque do Xurés: “decidimos optimizar las tierras y plantar olivos con lo que tener otra opción de futuro profesional que a la postre nos ha resultado clave porque el periodismo y su crisis nos ha devorado”, cuenta.
El sello familiar y gallego lo lleva en su nombre: “Eidos son las tierras minifundistas del sur de Galicia e Iria el nombre de mi hija”. Eidos de Iria es un aceite con historia: la familiar de Pepe G. Barroso y también la historia del olivo en Galicia. Son muchas las referencias históricas que apuntan a la larga tradición del olivo en algunas zonas de Ourense. Su desaparición, según estos estudios, se debe a la tala que ordenaron los Reyes Católicos para centralizar la producción del aceite en el sur de la Península. Pero Pepe G. Barroso apuesta por otra teoría: “las plantaciones de lino que había a montones en nuestra tierra en aquella época son muy invasivas como planta lo que pudo acabar con una buena parte del olivar gallego”, señala.
Pero sin duda lo que caracteriza al aceite Eidos de Iria es la pasión y el trabajo minucioso de sus productores: “aplicamos una buena parte de la permacultura, recogemos olivas en verdeo y en Luna Llena para obtener el mejor aceite posible, extraemos en frío y exprimimos con cuchillas en el molino, descartamos olivas “tocadas”, envasamos trimestralmente para mantener las mejores características organolépticas… amamos lo que hacemos porque buscamos con anhelo ser el mejor aceite del planeta”, explica Pepe, “te aseguro que nunca he padecido de ego exagerado. Lo conseguiremos porque ya estamos a un centímetro del trono”, concluye.
Nos cuenta su creador que buscan la mezcla de olivas bajo la influencia del Atlántico y el Continental “con terruños que le dan exclusividad, distinción, producto único y que nada tiene que ver con los aceites del sur”, explica. Eidos de Iria ha pasado de ser un aceite 100% gallego a ser 100% del norte: “a partir de octubre, con la nueva cosecha, será del norte al incorporar ya las producciones de nuestras parcelas sitas en el Bierzo, Zamora y Bajo Aragón”.
Nos habla de su proyecto inmerso en los trabajos de la cosecha, perjudicada este año por la sequía: “la sequía extrema que continúa junto con un demoledor pedrisco a comienzos de junio nos dejó sin una buena parte de la floración. El problema es mayúsculo porque los cosechadores del sur ya anuncian subidas de precio de más del 40% y nosotros también tendremos que hacerlo porque el caciquismo nos ha dejado sin ayudas”, apunta Pepe.
El hecho de ser pioneros en la producción de aceite en Galicia les ha perjudicado: “hemos pagado un precio muy alto que casi nos lleva a la depresión económica. Hoy tengo tres hijos: Iria, Adolfo y los Olivos”, dice Pepe.
Bajo el sello Eidos de Iria también hay otros productos: “nuestro producto más demandado son las olivas de las emociones conservadas en salmuera natural y con un aderezo de gastrochef. Después el aceite de oliva con menos de un 0,2º de acidez y cada día tiene más adictos el paté artesanal de aceitunas”.
En Galicia venden el 80% de su cosecha, su principal mercado: “no hay para todos ni nunca lo habrá. Conviene metabolizar el éxito. Hoy es mi mayor preocupación”, apunta Pepe. Nos cuenta que sus productos se venden en gastrotiendas de Galicia, País Vasco, París y Londres, junto a 29 restaurantes con Estrella Michelín y 74 restaurantes de reconocido prestigio.
Con su proyecto ya consolidado Pepe G. Barroso trabaja una nueva propuesta bajo la marca Eidos de Adolfo. Se trata de Brevas de Nazaret: “una higuera que conocimos hace siete años en Israel y que cuenta con unas brevas excepcionales y con la influencia decisiva del clima atlántico”, explica.
